La fuerza de los sueños

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La fuerza de los sueños

La historia de Laboratorio Abies comienza en 1996 como la concreción del sueño de sus fundadores, la familia Almada Vera, que anhelaba crear en nuestro país el primer laboratorio farmacéutico de medicamentos naturales y suplementos, inspirado en los grandes laboratorios que ya existían en el continente europeo.

Como muchas historias de éxito, la de Laboratorio Abies comenzó siendo un sueño que ante el impulso y el sacrificio de Arnoldo Raúl Almada Otero y Teresa Vera acabó escribiendo algunas de las primeras líneas del rubro farmacéutico en Uruguay.
A lo largo de estos 22 años, supimos que eramos afortunados por emprender y cumplir deseos cuando mucho de nuestro recorrido profesional ya lo habíamos hecho.

En aquellas etapas en las que otras personas piensan a veces en retirarse, tuvimos la motivación para trabajar con fuerzas renovadas en concretar un sueño”, recuerda Arnoldo Raúl Almada Otero. Hoy, tras más de dos décadas de aquella hazaña, el proyecto continúa en manos de una Almada Vera: Ibana, la hija mayor de los fundadores de Abies, se encuentra dirigiendo el mismo laboratorio que aprendió a querer en la mirada del esfuerzo diario de sus padres.

¿Cómo surgió este proyecto?

Raúl: Siempre fuimos un matrimonio emprendedor, nos casamos jóvenes y desde allí por 63 años hemos hecho todo juntos. Mi formación en la industria farmacéutica alopática, primero como gerente de Biochemie – Sandoz, y luego como gerente de Icu-Vita, y la preparación académica que recibía y a la que teníamos acceso, tanto en Uruguay como en Suiza y Austria, hizo que muy rápido conociera las nuevas tendencias en medicamentos farmacéuticos naturales y el uso creciente que tenían en Europa. La naturaleza ha sido parte de nuestra historia. Mi esposa y yo que crecimos en contacto ese mundo, así que el desarrollo profesional de ambos y la curiosidad por esos medicamentos fueron determinantes para comenzar un proceso de investigación, en 1988, que de a poco se fue transformando en un sueño: crear el primer Laboratorio Farmacéutico de fitomedicamentos y suplementos en el país.

¿Cómo fue desarrollándose Laboratorios Abies?

Raúl: En este sueño siempre fuimos dos y nos incorporamos al mercado con un pequeño equipo con el que dividimos las tareas. Mi esposa, Teresa, aportó la capacidad analítica y la visión negociadora para concretar con pasos firmes cada etapa del proyecto, y yo con la experiencia de 40 años en la Industria Farmacéutica, estuve a cargo del lanzamiento de productos, del marketing estratégico y la venta. Abies desarrolló aquella primera planta farmaceútica con GMP. Al comienzo, compramos una homeopatía que hoy se llama Naturaleza Pura y que tiene productos homeopáticos desarrollados de acuerdo a las técnicas homeopáticas, con la misma calidad de cada producto Abies. Pero el gran desafío para nosotros, era el desarrollo del Laboratorio farmacéutico que comenzó su actividad en 1996, luego de un largo período de registros ante el Ministerio de Salud Pública.

Ibana, ¿cómo llegaste a ocupar este lugar en la empresa?

En el año 2013, Abies se planteó cómo avanzar hacia la nueva era. Los directores de entonces, mis padres, empezaron a formar parte del Comité Asesor, y yo que desarrollaba mi carrera profesional en Argentina, donde era Brand Manager de IRSA Centros Comerciales, decidí sumarme al sueño que habíamos visto crecer y del que participamos al inicio junto con mis hermanos. Me mudé a Argentina apenas terminada la universidad y desarrollé allí mi carrera profesional, así que la vuelta ha sido la oportunidad de sumar lo aprendido a la experiencia que teníamos acá, respetando las características propias del contexto y del liderazgo que se ejercía. Y en eso estamos… Hemos pasado por la transición del cambio generacional, y hace una año otra hermana se sumó para llevar adelante el diseño de la imagen de la empresa.

¿Cuáles son los desafíos de un pyme nacional en este contexto farmacéutico?

La pyme es responsable en Uruguay de más del 90% del empleo generado y en América Latina de más del 60%. Una empresa como Abies tiene una capacidad de respuesta más rápida a las necesidades del mercado por las características de su estructura y de su proceso de decisión. En situaciones económicas complejas e inestables, poder rearmar estrategias y mirar el futuro con dinamismo es un plus que las pymes suelen tener, siempre que el proceso interno tenga el grado de profesionalización necesaria, y para eso necesitamos tener profesionales capacitados y comprometidos. En su estrategia de crecimiento, nuestro laboratorio se especializa solo en medicamentos y suplementos de origen natural, es decir, en base a extractos puros estandarizados según Farmacopea, porque estamos convencidos que la especialización y conocimiento orienta con claridad el trabajo diario y la proyección de futuro. Pero hoy algunos grandes laboratorios han incorporado parte de estos productos en sus líneas, lo que representa un desafío adicional y una sana competencia que favorece al consumidor. ¿Por qué elegirnos? Porque somos los únicos que sólo nos especializamos en estos medicamentos.

¿Cuáles son los objetivos planteados a mediano plazo?

Profesionalizar y ampliar el cono¬cimiento de las ventajas que representa para profesionales médicos, químicos farmacéuticos y consumidores, incorporar al tratamiento y cuidado de la salud medicamentos farmacéuticos naturales es uno de los objetivos que Abies seguirá desarrollando en los próximos años. También la tecnología como soporte al médico y al consumidor, para llegar con las novedades y los estudios de apoyo que determinaron la elección de cada nuevo lanzamiento. Las pymes son el apoyo de las economías regionales y las empresas familiares suman, además, un compromiso en primera persona, que va desde el cliente hasta cada empleado de la empresa. Aspiramos a desarrollar vínculos de compromiso e intentamos trabajar con un equipo motivado, orientado a resultados, que tiene objetivos y beneficios contra los que mejorar su performance.

Dentro de una familia hay confianza y amor, pero también discusiones. ¿Cuáles son los pro y los contra de dirigir una empresa familiar?

El reto de dirigir una compañía familiar pasa por la capacidad de trasmitir los valores y la tradición junto con el desafío de innovar y planificar a largo plazo. Ser capaz de adaptarte al entorno con los valores que la construyeron como empresa, pero arriesgando e innovando paracrecer y seguir desarrollándonos. Es importante estar al tanto de los nuevos avances que son aplicables e incorporarlos con éxito. Abies está en un proceso de expansión así que nuestra gestión diaria empieza en el mercado y termina en el Consejo familiar unificando criterios y decisiones.

¿Imaginás a tus hijos ocupando tu lugar en Abies?

No en esta etapa… Mis hijos son muy jóvenes, uno recién terminó la universidad, y el otro, está terminando el secundario, por lo que es el momento de aprender y desarrollar sus propios caminos. Imagino que a futuro se presenta un doble desafío de elección mutua; es decir, Abies deberá elegir por sus características personales y profesionales a quien siga adelante y el elegido será porque tiene la experiencia y la formación para estar allí. Entonces como empresa, y ya no como familia, intentaremos que nos elijan. Ahora es el momento de seguir creciendo, profesionalizando la gestión y la actividad sin perder de vista los valores familiares. Eso sería honrar a nuestros padres y fundadores.

¿Imaginás a tus hijos ocupando tu lugar en Abies?

No en esta etapa… Mis hijos son muy jóvenes, uno recién terminó la universidad, y el otro, está terminando el secundario, por lo que es el momento de aprender y desarrollar sus propios caminos. Imagino que a futuro se presenta un doble desafío de elección mutua; es decir, Abies deberá elegir por sus características personales y profesionales a quien siga adelante y el elegido será porque tiene la experiencia y la formación para estar allí. Entonces como empresa, y ya no como familia, intentaremos que nos elijan. Ahora es el momento de seguir creciendo, profesionalizando la gestión y la actividad sin perder de vista los valores familiares. Eso sería honrar a nuestros padres y fundadores.

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